martes, 3 de febrero de 2009

El zapato es de izquierdas (ossia, burda imitación desde muy lejos del estilo del gran escritor Jaime Capmany)


Los lectores de ABC de toda la vida pensarán ¿quién es este que se atreve a compararse con el vitriólico Jaime Capmany? Les doy la razón, a todos. Y todos dan la razón a lo de vitriólico, consulten si no el hiperenlace.
Desde que Bush esquivó los dos zapatos más famosos de toda la historia (con permiso de Fred Astaire y Gene Kelly), el zapatazo se ha convertido en la última moda de las protestas.

Los científicos franceses protestan con zapatazos por la falta de fondos. Probablemente Jospin y Mitterrand los financiaron mucho más...

Menos mal que el primer ministro chino ha sido también objeto de ese gesto, nada menos que en Oxford (¿o era Cambridge?), porque si no, el zapatazo hubiera pasado a convertirse en la nueva protesta antisistema, antitodo...antiderecha (¡estaba cantado!). De todos modos, lo de los zapatos de izquierdas y los zapatos de derechas es bastante engañoso. Por ejemplo, mis tías, llevaban cuando eran niñas aquellas botas de piel vuelta, que tanto gustaban a mis compañeros antiOTAN del instituto. Mis tías eran niñas (diez años) cuando la Guerra civil, pero se les quedó marcada la siguiente frase: os vamos a cortar las trenzas por fascistas (eso sería porque no les vieron las botas que llevaban...). Luego entramos en el terreno de los castellanos...pero el caso es que muchos hijos de Ferraz, que luego han estudiado en el Cardenal Cisneros, los llevaban. Por no hablar de la gama de deportivos, que merecerían un capítulo aparte.

Termino por fin con los zapatos de los políticos: ¡¡que levante la mano el que no los lleve italianos!!, eso sí, el casposo de Bono poniéndonos la corbata... si es queeee...

Y como las protestas de la derecha "b" (Espe, su vice y otros) contra Fidel, no acabaron a zapatazos en la puerta de la embajada de Cuba (probablemente los hubieran congido los funcionarios de la embajada para venderlos en el mercado negro de su país), no tengo más remedio que concluir lo que sigue. El círculo se cierra. Desde Jruschev y su protesta en la ONU hasta el actual presidente del Gobierno (Zapatero!!), definitivamente, el zapato, es de izquierdas!!!

2 comentarios:

J. Rogelio Rodríguez dijo...

Brillante, amigo mío. La verdad es que no has podido ser más circular...y emulando al maestro Campany.

La verdad es que sí: el zapato es básicamente de izquierdas... pero recuerda que a Fraga le llamaban ZAPATONES.

Un abrazo.

Manuel dijo...

Zapato, a tu Zapatero.
"La Revolución de los zapatos", el relato perdido de "Crónicas marcianas".
Un abrazo.