jueves, 12 de julio de 2012

El affayre Dreyfus...y los poetas. Crítica de Pedro Provencio


De nuevo os traía el libro de Jareño sobre el Affayre Dreyfus (en estos tiempos nuestros en que estamos todos tan indignados con todo). He aquí que acabo de recibir una suncinta y precisa crítica que, en su momento, escribió el poeta murciano Pedro Provencio. Os la reproduzco a continuación.
He aquí uno de esos infrecuentes libros de investigación en los que se dan la mano el rigor profesional, el apasionamiento del tema y la oportunidad de su publicación.
Jesús Jareño, galicista especializado en Charles Péguy y su época, ha tenido el acierto de aplicar su profundo conocimiento de Francia a la repercusión que en España tuvo uno de los escándalos más estrepitosos de la historia del país vecino: la detención y el juicio del capitán Dreyfus, su condena, y las incesantes polémicas y revisiones que llevaron al esclarecimiento de lo que no había sido más que una de tantas fechorías antisemitas. Los instigadores y autores de las falsificaciones que llevaron a Dreyfus hasta las peores humillaciones que puede sufrir un militar               -degradación  y calificación de traidor a la patria, además de la prisión- fueron altos cargos militares. La infalibilidad del ejército -mayor o menor según el grado- ha sido casi dogma de fe en este militarizado mundo. Ha sido y es.
Jareño hace una selección amplia y cuidadosa de artículos aparecidos en la prensa española de aquellos años, que se hacían eco del caso Dreyfus y opinaban sobre el papel del ejército en la sociedad con una libertad de apreciación que ya la quisieran muchos editorialistas de hoy. El artículo de Unamuno seleccionado, “La Patria y el Ejército”, publicado en 1906, es especialmente destacable por aquella santísima desfachatez que hacía del rector de Salamanca un ejemplo de heroísmo bien entendido.
Bueno, algunos párrafos del artículo de Unamuno dicen cosas como que "el patriotismo español debe ser común a los españoles todos, algo de que ellos participen y cuya recta interpretación no puede ser monopolio de una clase o de un cuerpo" (refiriéndose al ejército). La referencia es de 1906...lástima que treinta años después no se recordaran sus palabras...pero bueno.